Ha llegado otra vez esa época del año: ¡invierno! Aquí, en el hemisferio norte, el cielo despejado y nítido ofrece vistas espectaculares de varios objetos, siendo el más famoso de todos Orión el Cazador.

Orión es una excelente manera de probar la oscuridad del cielo. A simple vista se puede detectar fácilmente esta constelación con forma de reloj de arena. Conocido como un cazador épico en la antigüedad grecorromana, Orión y todas sus partes tienen muchos nombres y significados en muchas culturas. En la mitología egipcia, esta constelación representaba al dios Sah. Los babilonios lo llamaban El Pastor Celestial. En la mayoría de las culturas, es el Cinturón de Orión el que tiene muchas historias: Shen en el folclore chino o Tayamnicankhu en la narración Lakota. Pero los mayas de Mesoamérica creían que parte de Orión contenía El Hogar Cósmico: el fuego de la creación.

A 1.500 años luz de la Tierra se encuentra la región de formación estelar y la joya de la corona de Orión: Messier 42 (M42), la Nebulosa de Orión. Parte de la "espada" de Orión, esta nube de polvo y gas de 24 años luz de ancho se encuentra debajo de la primera estrella en el Cinturón de Orión, Alnitak, y puede verse fácilmente a simple vista bajo cielos moderadamente oscuros. También puedes utilizar prismáticos o un telescopio para apreciar más detalles, como el Trapecio: cuatro estrellas en forma de piedra angular (o diamante de béisbol). Estas estrellas jóvenes constituyen el núcleo de este magnífico objeto.

¡Por supuesto, no es sólo para mirar! M42 es una de las nebulosas más fotografiadas que existen, fotografiada tanto por astrofotógrafos aficionados como por observatorios profesionales y telescopios espaciales. Durante mucho tiempo ha sido un lugar de interés para los telescopios espaciales de rayos X Hubble, Spitzer y Chandra, y el telescopio espacial James Webb se unió a la lista en febrero de 2023. A principios de este año, la NASA y la Agencia Espacial Europea publicaron una nueva foto de la Nebulosa de Orión tomada desde la NIRCam (Cámara de Infrarrojo Cercano) de JWST, que permitió a los científicos tomar imágenes de esta región de formación estelar temprana en longitudes de onda cortas y largas.

Pero las estrellas no son los únicos elementos visibles aquí. En junio de 2023, NIRCam y MIRI (instrumento de infrarrojo medio) del JWST tomaron imágenes de un sistema estelar en desarrollo con un disco protoplanetario formándose a su alrededor. Así es, un sistema solar que ocurre en tiempo real, ubicado dentro de los bordes de una sección llamada Barra de Orión. Los científicos han llamado a este disco de formación de planetas d203-506. Al capturar estos objetos en múltiples longitudes de onda de luz, los astrónomos tienen una visión aún mayor de qué otros objetos podrían estar escondidos dentro de estas nebulosas regiones de hidrógeno de nuestro cielo nocturno. Esta técnica se obtiene mediante imágenes multiespectrales y es posible gracias a numerosos telescopios espaciales nuevos.